A la hora de comprar un vehículo, más allá del precio y el modelo, el tipo de motor que utilice se convierte en un aspecto fundamental que determinará los costes de mantenimiento y el tipo de combustible que debemos echarle. Las opciones son dos, pero no siempre resulta fácil decidirse, por eso en unComo.com te damos algunas claves para que sepas cómo elegir entre un coche de diésel o uno de gasolina.
Pasos a seguir: 1Una ventaja importante que tienen los coches con motor a gasolina sobre los de diésel es su precio. Son más económicos, por lo que si estás un poco ajustado de presupuesto al momento de comprar tu vehículo, el de gasolina es la mejor alternativa.
2Sin embargo la razón por la que los coches con motor a gasolina son más económicos al momento de la compra es porque el consumo es mayor en cuanto al combustible. Por eso si eres de los que recorre grandes distancias con tu coche, la mejor alternativa es pagar un poco más por uno con motor a diésel, pues al momento de reponer el combustible este tipo de vehículos consume entre 15% y 20% menos que los de gasolina. El ahorro periódico compensa la inversión de la compra.
3Hace algunos años el rendimiento de los coches de gasolina era superior al de los motores con diésel, sin embargo la industria automotriz ha trabajado duramente para igualar los vehículos en este aspecto, por eso hoy en día ambos ofrecen prestaciones similares, de modo que aspectos como la velocidad o el aguante son similares en ambos motores.
4Mientras más grande y pesado sea el coche más consumo de combustible tendrá. Si estás pensando en elegir un automóvil de gran tamaño, una monovolumen o un todoterreno la mejor alternativa es un motor a diésel pues a mayor tamaño mayor consumo. Esta elección te ayudará a ahorrar un buen dinero cada vez que llenes el depósito.
5En cambio si la idea es comprar un coche pequeño o mediano para circular en la ciudad y solo ocasionalmente salir de viaje, entonces puedes optar por un motor a gasolina, pues en ese caso la diferencia de ahorro en el combustible no te beneficia tan directamente como en el caso de los vehículos de mayor tamaño o aquellos que deben recorrer grandes distancias diariamente.
6Los motores a diésel tardan más en calentarse, lo que los convierte en alternativas ideales para climas muy cálidos o para personas que recorren distancias largas. Sin embargo si vives en una zona con inviernos muy intensos o usas el coche para trayectos breves, lo mejor es el motor a gasolina pues el sistema de calefacción funciona de forma más eficiente manteniendo a los ocupantes calientes durante el invierno.
7Un aspecto importante es el mantenimiento del coche. A pesar de los muchos avances hasta ahora los servicios de los coches a diésel suelen ser un poco más costosos que los coches a gasolina, por lo que realmente has de pensar muy bien si vale la pena y si realmente recorrerás un amplio kilometraje para que la inversión en la compra y en el mantenimiento acabe por favorecer tu bolsillo.
8Sin embargo al momento de vender tu coche, los de diésel se venden más que los de gasolina, por lo que conseguirás salir más rápido de ellos.
9Si a pesar de todas estas aclaratorias aún sigues dudando y no sabes cómo elegir entre un coche diésel o a gasolina, te invitamos a consultar una web que te ayudará a calcular la rentabilidad de la inversión según el kilometraje aproximado que haces al año. Visita Principiantes.info y podrás saber según tu recorrido anual y los costes de tu vehículo actual, cuál motor te resultará más beneficioso.