Un motor turbo, la mayoría de los existentes en el parque móvil actual, si recibe los cuidados que requiere, tiene la misma esperanza de vida que uno atmosférico. Sin embargo, si no lo tratamos de la forma adecuada, se estropeará antes y, además, nos obligará a realizar un desembolso considerable. Teniendo en cuenta que la clave está en el aceite que riega las partes mecánicas, en unComo.com te explicamos cómo cuidar un motor turbo.
Pasos a seguir: 1Cuando vayamos a arrancar el coche, debemos esperar un minuto antes de iniciar la marcha, con el objetivo de que el aceite llegue a todas las partes mecánicas de nuestro motor turbo antes de que la maquinaria se ponga en marcha. Así, evitaremos rozaduras en seco. En el caso de que el coche esté a la intemperie y el clima sea muy frío, debemos dejar pasar de tres a cinco minutos antes de que el coche empiece a rodar.
2En relación con esta primera indicación, otro cuidado del motor turbo consiste en que debemos encender el coche con el pie sobre el embrague de forma que lo pisemos a fondo y sin tocar el acelerador. El objetivo es el mismo, que el aceite llegue a todos los rincones de nuestro motor turbo, de forma que esté lubricado, antes de que tenga que ponerse a trabajar.
3Una vez en marcha, también debemos intentar que el motor turbo no trabaje a tope hasta que se haya calentado lo suficiente, es decir, después de unos veinte minutos de camino. Así, hasta entonces, debemos olvidarnos de los acelerones. De todos modos, por motivos ecológicos, en los que puedes profundizar en este artículo sobre Consejos para una conducción eficiente, siempre deberíamos huir de una conducción brusca.
4Y antes de salir del coche, al cesar la marcha, también deberemos dejar el motor encendido dos minutos. La razón la encontramos, de nuevo, en el aceite. Si apagamos el coche nada más parar, el aceite se carboniza y quedan más restos en las distintas partes de nuestro motor turbo. Así que, una vez más, demos tiempo al aceite, esta vez para que se enfríe.