¿Tú bebé ya tiene 8 meses de edad? Entonces ha llegado el momento de iniciar una nueva etapa donde el cambio alimenticio juega un importante papel. Probablemente ya habrás ido notando muchos cambios en el pequeño, se ha hecho un poco más mayor, interactúa más con todo su entorno y ha empezado ha actuar como un pequeño explorador con ganas de tocar, hablar y lanzarse a todo aquello que ve. Durante esta etapa, la alimentación del pequeño es muy importante, pues ya no solo debe alimentarse de lo que la leche materna, sino que es hora de incorporar nuevos alimentos en su dieta. En unComo.com te explicamos qué puede comer un bebé de 8 meses. Ten paciencia, pues es una etapa de adaptación tanto para los papás como para él. ¡Toma nota!
Bebé de 8 meses: cambio de alimentación
A los 8 meses empieza una etapa en el desarrollo del pequeño importante, por lo que la alimentación deberá ser adecuada para que el pequeño crezca sano y fuerte. Es hora de combinar la leche materna o el biberón con otros alimentos algo más sólidos, que además él mismo pueda explorar y toquetear. Recuerda que durante esta nueva etapa tu pequeño se habrá convertido en todo un explorador que desea investigar todo lo que le envuelve.
Existen algunas señales que te indicarán que tu retoño está preparado para dar un paso más y cambiar su dieta. Por ejemplo, que es capaz de mantener su equilibrio, tanto con la cabeza erguida, como sentado en su propia sillita para comer, o masticar él solito. Asimismo, sus ávido ojos empezarán a mostrar interés por la comida, deseando probar cosas nuevas o negándose en rotundo a abrir boca. Quizás también es capaz de pinzar cosas con sus dedos, para sostenerlas o llevárselo absolutamente todo a la boca. Observa a tu hijo y consulta con tu pediatra para confirmar que ha llegado el momento de cambiar su alimentación.
Bebé de 8 meses: alimentos adecuados
A partir de los 8 meses de edad, ya puedes incorporar nuevos alimentos en la dieta del pequeño. No obstante, deberás combinar dicho cambio alimenticio con algunas tomas de leche materna o biberón; lo más recomendable es seguir con unas 3 y 5 tomas de leche al día, en pocas cantidades.
Para empezar, y siempre siguiendo la pauta de tu pediatra, podrás darle a tu pequeño pequeños trozos de queso blanco blando. Estos quesitos son ideales y deben empezarse a tomar antes de la leche de vaca, pues gracias a su proceso de fermentación son mucho más digeribles. Por otro lado, empieza a apostar por los cereales como la avena, la cebada, el trigo o el arroz, en papilla por las mañanas será el alimento ideal para ellos.
Por otro lado, es el momento de incluir en la dieta del pequeño frutas como el plátano, la pera o el melocotón, y verduras tales como la zanahoría cocida, el calabacín, la patata o el boniato. Recuerda triturarlo todo en una papilla para que sea mucho más fácil de digerir, piensa que el pequeño todavía no cuenta con todos sus dientes. Eso sí, si deseas que investigue con los alimentos, los coja y los saborée te proponemos darle molla de pan, galletas o trocitos de fruta.
Por último, y siempre bajo supervisión médica, empieza a incorporar, en pequeñas cantidades, purés con un poco de carne roja o de ave o pescados sin espina.
Bebé de 8 meses: consejos
Recuerda que el bebé todavía es pequeño, por lo que todo deberá ir, a groso modo, en papilla o puré. También debes ser consciente de que las cantidades deberán ser pequeñas, pues todavía no está lo suficientemente desarrollado como para ingerir muchos alimentos.
Por último, es importante que incorpores los alimentos poco a poco y de manera progresiva, dejando que el bebé se adapte a cada uno de ellos. Piensa que si rechaza alguno de los nuevos alimentos será muy difícil hacerle probar cosas nuevas, así que te recomendamos dejar unos tres días de margen entre alimento y alimento. De este modo, además, podrás cerciorarte de que tu bebé no sufre ninguna reacción alérgica a estos nuevos alimentos. ¡Crecerá sano y fuerte!