Los coches son máquinas que, por mucho que se cuiden, antes o después terminan dando problemas. El embrague del coche, como seguramente habrás experimentado alguna vez, es uno de estos clásicos.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que, cuanto más se cuide un coche y cuanto antes se solucione una posible avería, más posibilidades tendremos de que los daños sean menores y estos no afecten al mecanismo del automóvil. Teniendo esto en cuenta, si notamos algún cambio en el tacto del embrague, así como otros posibles problemas con este pedal, es posible que haya llegado el momento de pasarse por el taller para que lleven a cabo una revisión y evitar así cualquier posible imprevisto.
Piensa que siempre será mejor llevarlo al taller por este motivo que esperar a que el coche nos deje tirados en medio de la carretera. Si quieres descubrir cómo saber si el embrague patina, sigue leyendo unCOMO. ¡Te lo contamos todo!
Deslizamiento y falta de potencia en el embrague del coche
Uno de los síntomas más claros de que tienes el embrague del coche estropeado, son los problemas con la aceleración. Cambias a marchas largas, demandas mayor velocidad al automóvil pero el coche no acelera en la proporción que debería. Si te has encontrado con esta situación, es muy probable que estés ante un claro ejemplo de un embrague que patina. Si esto sucede, lo más común es que la acción del embrague no llegue al resto del motor, lo que provoca la sensación de que "patina" al no lograr que el vehículo responda a lo que pedimos.
Este problema se nota durante toda la conducción pero, de forma más clara, en cuestas o adelantamientos, que es cuando necesitas más potencia por parte del coche. Si te encuentras en esta situación, es importante que reduzcas la velocidad a una en la que el coche se mueva con soltura y no dé muestras de problemas.
Por lo general, se recomienda conducir por debajo de los 100 kilómetros por hora, así como acudir a un taller lo antes posible para que se lleve a cabo una revisión del estado del vehículo.
El coche huele a quemado
Otro de los síntomas que te puede indicar que estas frente a un caso de embrague que patina es el olor a quemado.
Este olor se puede manifestar tanto cuando mantienes el embrague pisado durante mucho tiempo como cuando lo fuerzas demasiado en diferentes terrenos. Esto conlleva un mayor rozamiento de las piezas internas del coche, incluido el mecanismo del embrague. Este rozamiento es el que provoca este característico olor a quemado.
Si no se soluciona este problema, puede dañar otras piezas del vehículo o bien provocar que el embrague patine con mayor facilidad.
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Problemas con el cambio de marchas
Por otra parte, no se puede obviar que la función principal del embrague es la de cambiar las marchas del vehículo. Si cuando cambias de una marcha a otra notas que el embrague no responde como debería, es decir, que la marcha no se cambia con facilidad o que, incluso cuando lo hace, el vehículo se acelera y hace ruidos extraños, lo más probable es que el embrague esté dañado.
Estos daños pueden ser de diferentes tipologías. Uno de los casos más comunes es que las ruedas dentadas del interior del mecanismo se hayan roto o deformado como consecuencia de forzar el embrague. En estos casos, será necesario pasar por el taller para que lleven a cabo una revisión y puedan reparar el vehículo.
Ruidos molestos y extraños en el coche
Finalmente, otro síntoma que te puede ayudar a saber si el embrague del coche patina o está dañado es la presencia de ruidos que no deberían estar ahí.
De hecho, aunque la presencia de ruidos tales como chirridos y rozamientos forzados puedan darse en el momento de cambiar de marcha, estos ruidos pueden aparecer, también, durante el uso de marchas en continuo, es decir, cuando no se esté usando el embrague. En estos casos, es importante estar pendiente de los sonidos y posibles ruidos extraños que haga el vehículo, así como de los momentos en los que se oigan con más claridad. Algunos ejemplos son:
- Ruidos molestos cuando el coche sube una cuesta
- Ruidos molestos cuando el coche baja una cuesta
- Ruidos extraños cuando el coche acelera
- Ruidos extraños cuando el coche está frenando
Si los ruidos se mantienen en el tiempo y no existe una causa aparente, también es posible que se trate de un problema del embrague, independientemente de que los ruidos se manifiesten cuando se haga uso de este pedal o no.
Si este artículo te ha resultado útil y quieres descubrir más cosas sobre tu vehículo, no te pierdas este texto sobre Cuándo debo cambiar el embrague de mi coche.