Es muy natural que en el núcleo familiar surjan problemas, la relación con la familia no está exenta de contrariedades, y esto es algo que debes aceptar. Lo importante es encontrar la forma de lidiar con todo lo que ocurra y solucionar cualquier imprevisto que tenga lugar con tus familiares más allegados. Una relación ideal familiar se crea cuando se resuelven los problemas que van ocurriendo, así se fortalecen los lazos y se estrechan los vínculos. Sigue leyendo este artículo de unComo.com si deseas encontrar útiles consejos sobre cómo resolver conflictos familiares.
Pasos a seguir: 1La familia hay que verla como un ser vivo que crece, aprende, evoluciona e incluso a veces se estanca. Existen muchas situaciones conflictivas que pueden atravesar las familias a lo largo de la vida: el paso de las diferentes etapas vitales, comunicación con los hijos, con la pareja, el trabajo, las tareas de casa... Los problemas son muchos y diferentes, y negar la realidad no te acercará a ninguna solución. El conflicto es inevitable en el ser humano y cuando se produce se ponen en marcha mecanismos psicológicos y fisiológicos que pueden convertir el problema en una tónica. Lo que debes hacer es ver el conflicto como una oportunidad de cambio, no como una lucha sin sentido.
2Un primer paso para solventar conflictos es ser un observador neutral. Debes mirar lo sucedido desde una postura objetiva, dejando tu postura y tu enfado de lado. No se trata de juzgar ni echar la culpa a nadie, hay que ver lo experimentado desde otro prisma para conseguir percibir el verdadero problema. Por ejemplo, puedes decir que "has notado que en el último mes has dicho que no a ningún plan que te he propuesto"; esto no es una crítica, estarías constatando un hecho objetivo, sin dar tu opinión.
3Cuando ya has conseguido expresar en voz alta y de forma neutral lo que necesitabas decir, ahora es el momento de ser capaz de decir lo que sientes. En este punto, no se trata de actuar como si fueras una víctima, dí lo que sientes de forma honesta y no intentes dar pena. Esta estrategia te funcionará si eres sincero, pero sin caer en la manipulación sentimental. Siguiendo con el ejemplo anterior, podrías decir que sientes que no te tienen en cuenta para decidir realizar algún plan. Piensa seriamente antes de hablar para conseguir que tu pareja, tus hijos o cualquier otro miembro de la familia reaccione de una forma positiva y predispuesta a la conversación.
4El siguiente paso importante es la conversación. Muchas veces irá acompañado de una petición para hablar en serio del problema. En este momento, recuerda no pedir ni ordenar nada sobre el tema, solo debes hacer lo posible para conseguir tener una charla del asunto en cuestión. Cuando expreses tu intención de hablar, sería conveniente que recalcaras lo beneficioso que será para ambos. Si tu interlocutor lo percibe como algo positivo, seguro que estará con ganas de hablar del conflicto.
5Una vez se ha conseguido llegar a la conversación para solucionar el problema, debes mostrarte muy abierto a escuchar a la otra persona. En esa charla, debes ser capaz de identificar las razones que han desembocado en el conflicto, pedir perdón si es el caso y finalmente concretar e implementar las soluciones necesarias para acabar con el problema en cuestión. Todo con el objetivo de que esto no vuelva a ocurrir en el futuro.
6También puede resultarte útil los consejos que indicamos en el artículo Cómo llevarse mejor con la familia, ponlos en práctica y evita las discusiones y los conflictos con aquellos que más quieres.