En caso de condiciones climatológicas adversas, las escobillas limpiaparabrisas representan un papel fundamental. Si no barren bien y no evacuan correctamente el agua, el granizo o la nieve, impiden que llegue bien una información preciosa a nuestros ojos. Unos segundos pueden resultar vitales para la vida de los ocupantes de un vehículo o de los peatones.
Pasos a seguir: 1Si las escobillas dejan zonas por barrer, originan extraños empañados, hacen ruido o saltos, ha llegado el momento de su reposición.
2Aconsejamos como adecuado su cambio después del verano. No hay nada peor para sus componentes que las prolongadas jornadas de sol y las altas temperaturas.
3Algunos modelos de coches incorporan detectores de desgaste muy útiles, esto hace que ya no sea una cuestión "cuándo cambiar los limpia" ya que el propio coche nos indica cuando.
4El desgaste de las escobillas está relacionado con su uso frecuente o con las agresiones ambientales a las que están expuestas como el calor, las heladas, el polvo o la arena. De forma general, las escobillas duran entre 18 y 24 meses.
5Los síntomas del desgaste de las escobillas del limpiaparabrisas son:
- Si sientes rugosidades y/o cortes, al deslizar el dedo por el filo de la escobilla.
- Si la superficie del parabrisas no queda totalmente limpia: Quedan estrías, zonas húmedas o zonas sin limpiar.
- Si se producen pequeños saltos que provocan que la escobilla no deslice suavemente sobre el cristal.
- Si se escuchan ruidos durante el funcionamiento de la escobilla