Una pieza deteriorada, un fallo eléctrico, un problema de combustible y hasta algún despiste... son muchos los motivos que pueden provocar que el coche no arranque en el momento de la puesta en marcha y desencadenar una situación de cierto "pánico" al pensar en la posible avería (y en su coste).
Si te has preguntado "¿por qué mi coche no arranca?", sigue leyendo este artículo de unCOMO y podrás conocer cuáles son las causas más frecuentes por las que esto sucede. Antes de llamar a la grúa, te damos las claves para que puedas hacer algunas sencillas comprobaciones y detectar cuál podría ser el problema.
La batería
La batería es la encargada de acumular la energía que requiere el vehículo para su puesta en marcha y su correcto rodaje. Si tu coche no arranca, una de las causas más probables es que la batería esté deteriorada o totalmente descargada, quizá porque tu coche lleva parado mucho tiempo. Si al poner la llave de contacto el vehículo no da señal alguna de intento de arranque y, sobre todo, si compruebas que no se encienden las luces del tablero o los faros, probablemente un fallo de la batería es la causa del problema.
Intentar arrancar tu coche ‘al empujón’ puede funcionar si la batería aún conserva algo de energía y, también, intentar el arranque con pinzas conectadas a la batería de otro coche. Puedes hacer la prueba para arrancarlo de esta manera y poder, así, llegar a un taller donde sustituir tu batería por otra nueva.
Te recomendamos leer estos otros artículos sobre Cómo arrancar un coche sin batería y Cómo arrancar un coche con pinzas.
El combustible
Si en tu caso piensas "mi coche no arranca y tiene batería", por lo que descartas la causa anterior, hay otras posibles causas que pueden encajar. Por ejemplo, aunque es evidente, hay que recordar que sin combustible el coche tampoco arrancará. Puede que hayas apurado demasiado a la hora de repostar o que el depósito de la gasolina presente alguna pérdida y no te hayas dado cuenta. Otra posibilidad es que tengas suficiente gasolina o gasoil pero la avería esté en la bomba que impulsa el combustible hasta el motor o en alguno de los filtros de este mecanismo.
Tendrás que probar a rellenar el depósito de gasolina si ves que hay poca o bien, tendrás que llevar a revisar si hay un escape o alguna pieza no funciona bien. También puede interesarte leer este otro artículo sobre Qué hacer si me quedo sin gasolina.
El motor de arranque
Su nombre lo dice claro y es una pieza clave para que tu coche arranque a la primera. Con el paso del tiempo y el desgaste del propio uso, el motor de arranque va deteriorándose y ha de ser sustituido por uno nuevo. Este problema puede confundirse con un fallo en la batería, pero si al intentar arrancar, las luces del vehículo se encienden correctamente y además notas algún ruido anómalo en el momento del contacto (sin lograr arrancar), probablemente el causante de que tu coche no pueda circular es el motor de arranque que necesitas cambiar. Además, con la llegada de las bajas temperaturas, un motor de arranque gastado puede que no sobreviva.
Ahora ya lo sabes, si te has encontrado con esta situación y en concreto has pensando "mi coche no arranca pero se encienden las luces" o "mi coche no arranca y hace un ruido raro", tendrás que llevar a revisar el motor de arranque a un mecánico y, muy probablemente, cambiarlo.
El aceite
Realizar un correcto mantenimiento del vehículo es esencial para prolongar su vida útil. Ese mantenimiento incluye los cambios de aceite periódicos que garantizan la correcta lubricación de las distintas piezas y engranajes del vehículo. Si tu coche no arranca, comprueba el nivel de aceite.
Si es demasiado bajo o presenta otros problemas, como una textura demasiada líquida o, por el contrario, demasiado viscosa, el coche no se pondrá en marcha y, además, si consigues arrancarlo con el aceite en mal estado, te expones a tener una avería aún mayor que la que supone un simple cambio de aceite. Aquí puedes leer sobre Qué hacer si el coche pierde aceite y Cómo saber qué aceite lleva mi coche.
Los sistemas eléctricos y de seguridad
Las innovaciones actuales, que incorporan los vehículos modernos, aportan comodidad pero también pueden traer algún que otro inconveniente. Si el tuyo cuenta con sistemas de seguridad, como el bloqueo antirrobo, puede que se haya activado accidentalmente y, si no lo desactivas, tu coche no arrancará. También puede ocurrir que te hayas dejado la llave (que sueles llevar en el bolsillo) y que tu vehículo reconoce sin necesidad de ser introducidas en el contacto. Sin ella, tampoco arrancará. Además, ¿has comprobado si tiene pila? Sin esa llave en buen estado, no podrás abrir tu coche ni hacer que arranque.
Las bujías y los inyectores
Son dos tipos de piezas que también suelen estar detrás de los problemas de arranque. Unas bujías sucias o deterioradas harán imposible que se realice el contacto necesario para la puesta en marcha del motor. Por su parte, los inyectores se encargan de impulsar la cantidad justa de combustible hacia el motor y si no lo hacen correctamente también pueden provocar que el coche no arranque, sobre todo en vehículos diésel. Si al poner en marcha el coche parece que ‘quiere’ arrancar pero finalmente no lo consigue, un fallo en alguno de estos componentes puede ser la causa.
Conoce aquí Cómo limpiar las bujías y Cómo limpiar los inyectores del coche.
Los fusibles
Un fusible fundido o quemado es otro motivo más que probable de un defectuoso funcionamiento del sistema eléctrico que provocará que el vehículo no se mueva. En un taller, podrán comprobar de manera sencilla si hay algún fusible que no cumple su función y sustituirlo con facilidad.