El humo expulsado por el tubo de escape del coche puede decir mucho de cualquier avería que esté presente y cuando nos encontramos en presencia de humo negro, es muy común que las personas se desconciertan pensando en que es algo muy grave y que puede dañar seriamente la vida útil del automóvil.
En su mayoría, esta característica en el humo, cuando se describe de color negro, es debido a una mala combustión, es decir que al menos el 90% de las causas se derivan de que hay un problema en la combustión de la gasolina. Si te ha sucedido y te preguntas "¿por qué mi coche echa humo negro?", en unCOMO te traemos las posibles causas y soluciones a dichas situaciones.
Tu coche echa humo negro por mala pulverización
¿Por qué sale humo negro del tubo de escape? Pues puede haber mucho motivos pero para comenzar, puede deberse a fallos en los inyectores o directamente en la bomba de inyección. En el caso de los inyectores puede deberse a obstrucciones, roturas o suciedad dentro de estos; dichas causas originan una mala combustión, partiendo de aquí la expulsión de humo negro.
Dependiendo del estado de obstrucción que presente la pieza, puede emplearse una solución limpiadora de inyectores, lo que ayudará muchísimo contra los escapes. En el caso de que se encuentren rotos o que la suciedad se encuentre extremadamente cristalizada o endurecida, se debe de reemplazar la pieza.
En este otro artículo de unCOMO te contamos Cómo limpiar los inyectores del coche.
Por otro lado, la mala pulverización de la bomba de inyección, puede deberse a una mala regulación en dicha pieza, lo que genera un exceso de presión haciendo que los inyectores se pulvericen de manera descontrolada, ocasionando un exceso de carburos. La solución es reparar o bien, cambiar la bomba de inyección por una nueva.
Mala presión de la gasolina
En muchas ocasiones, el circuito encargado de la distribución de gasolina al motor puede averiarse; dicha avería puede generar cambios en la presión del combustible haciendo que la bomba de gasolina expulse demasiado y con un exceso de fuerza el combustible al motor. Además, de hacer salir humo negro del tubo de escape de tu coche, este problema hace que tu coche consuma más gasolina de la necesaria, por tanto por un motivo u otro conviene repararlo cuanto antes.
Esta falla es necesaria verificarla en el taller con un mecánico especialista, de igual modo realizar cualquier reparación en el circuito o propiamente en la bomba.
Es una señal de que el filtro de aire está sucio
Puede variar dependiendo del coche y las características que presente, pero en el caso de vehículos antiguos que tienen carburador, el humo negro excesivo saliendo por el tubo de escape será notorio y, en cambio, en el caso de autos nuevos que cuenten con sistema de inyección, más que humo, comenzará a tener problemas para acelerar.
Cuando los filtros de aire se tapan u obstruyen por exceso de suciedad, la cantidad de aire que entra a los cilindros para hacer combustión es extremadamente poca, generando una combustión pesada y, por consiguiente, humo negro.
La solución más adecuada es cambiar el filtro de aire o mandarlo a limpiar con un especialista.
Válvula EGR averiada
Otro motivo que responde a tu duda de por "¿qué mi coche echa humo negro?" es un problema en la válvula EGR. Esta válvula llamada válvula EGR, como sus siglas en inglés indican y que podemos traducir como Recirculación de Gases de Escape, se encarga de reducir la emisión de CO2 producida por el coche. Esto se logra gracias a la recirculación de los gases a la cámara de combustión, haciendo que por medio del colector de admisión, estos se quemen de nuevo y generen muchísimo menos CO2 a como sería normalmente.
El proceso se lleva a cabo abriendo y cerrando dicha válvula, cuando esta se sobresatura de carbonilla, comienza a presentar problemas para abrir y al ocurrir esto, no pasa oxígeno limpio, únicamente aire ya contaminado con la misma carbonilla, ocasionando que el combustible no se queme en su totalidad y que el tubo de escape expulse humo negro.
Para solventar dicho problema, se debe extraer la valvula EGR y limpiarla a profundidad, de igual modo revisar si tiene alguna rotura y de ser así, reemplazarla.
Problemas con el caudalímetro
La función de este artefacto es medir la cantidad de aire que aspira el motor para poder controlar tanto la necesidad de gasolina, como la cantidad de gases que emite el motor del coche. El caudalímetro es un sensor que se encarga de indicar a los inyectores cuándo debe hacerse la pulverización y la cantidad adecuada de combustible. Cuando la pieza tiene alguna rotura o presenta fallas en su estructura, comienza a realizar medidas erróneas de aire, haciendo que se sobresature de combustible.
Para solucionarlo, extrae el caudalímetro y limpia el sensor. Si presenta un daño excesivo, cámbialo por uno nuevo para evitar el humo negro.