5 señales de que su hijo necesita ayuda adicional para aprender a leer.
Los primeros componentes básicos de la lectura son fundamentales para ayudar a su hijo a convertirse en un lector seguro y comprometido. Los primeros libros deben centrarse en las letras, la fonética y el reconocimiento constante.
Reconocimiento de letras y sonidos
Según Gideon Math and Reading, un programa de tutoría de lectura en Frisco, TX, el reconocimiento de letras es necesario para que los niños aprendan a leer. Los primeros pasos para aprender a leer incluyen pronunciar las cosas. Las palabras que comienzan o terminan con la misma letra y sonido son comunes en los libros para niños y funcionan para reforzar su capacidad de reconocer esta letra rápidamente. Si a su hijo no le gusta leer en voz alta, es posible que no reconozca las letras con facilidad.
La comprensión es clave
Cuando su hijo comience con un libro nuevo, siéntese con él y discuta la historia que espera encontrar. Por ejemplo, revise la portada y léales la parte de atrás o inserte una sinopsis para ayudarlos a prepararse. Lean juntos una página y pídale a su hijo que describa lo que acaba de suceder y que considere lo que puede suceder a continuación. Si su hijo no puede entender la historia, no querrá pasar la página.
Falta de interés
Si su hijo evita leer, es importante que encuentre libros basados en un tema que disfrute. ¿Qué le fascina a tu hijo? Los niños a los que les encantan los dinosaurios probablemente no disfrutarán de los libros sobre árboles y los niños a los que les encantan los coches no querrán leer sobre los astronautas. Aprender a leer requiere un poco de práctica de leer en voz alta y para ellos mismos para desarrollar y mantener el conjunto de habilidades, así que haz tu mejor esfuerzo para encontrar libros que aumenten su curiosidad.
Falta de conexión
Es posible que su hijo aprenda a disfrutar de la lectura por su cuenta con el tiempo, pero tenga cuidado de evitar demasiado aislamiento. Siéntese cerca de ellos y pídales que le lean en voz alta. Pronuncien las palabras juntos y felicítenlo cuando puedan hacerlo solos. Mantengan juntos un diario de lectura para ayudar a su hijo a realizar un seguimiento tanto de su tiempo como de sus logros. Ayude a su hijo a estar entusiasmado con su progreso.
Postura y seguimiento
Si su hijo se inclina sobre un libro, es posible que le cueste ver las letras o que le cueste seguir el rastro. Use una cartulina blanca como marcador y anime a su hijo a usar el marcador para subrayar la oración en la que está trabajando. Con el tiempo, es posible que solo necesiten usar el marcador debajo de palabras difíciles, pero el texto aislado puede ayudar a su hijo a concentrarse.
Estamos inundados de pantallas. Siempre que sea posible, modele la alegría de leer para su hijo. Apague la televisión, siéntese y abra un libro. Anime a su hijo a unirse a usted y aprender a disfrutar estos momentos de tranquilidad. Esté atento a hacer que la lectura sea parte de todos los días.