¿Cómo minimizar los efectos emocionales del divorcio en los niños?
Cuando te casas con la persona que amas, el divorcio es lo último que tienes en mente. Sin embargo, el divorcio es una triste realidad que muchas parejas enfrentan en algún momento de su matrimonio, especialmente ahora que las parejas pasan tiempo aisladas debido a la crisis de salud mundial.
Ver a su familia desmoronarse es doloroso no solo para los padres sino también para los niños, razón por la cual los padres deben esforzarse por minimizar los efectos emocionales de la separación cuando el divorcio es inevitable.
Evite tener discusiones frente a los niños
La vida está llena de altibajos, y es prácticamente imposible que las parejas no se encuentren con algún problema de vez en cuando. Lo importante es cómo los padres manejan sus discusiones y desacuerdos. Discutir frente a los niños solo hará que su hogar se sienta como un campo de batalla en lugar de ser un lugar seguro y feliz. Además, todas las peleas, los gritos y especialmente la violencia tendrán un efecto perjudicial en la psique de los niños, ya que aún se están desarrollando y aún son bastante sensibles. Esto también será un mal ejemplo para ellos cuando se trata de manejar conflictos, ya que todavía están aprendiendo a entablar relaciones.
En cambio, los padres deben tratar de trabajar juntos para resolver sus problemas y manejar sus problemas maritales cuando los niños no están. Hablar con un consejero de divorcio puede ser una forma efectiva de abordar cualquier problema y comunicarse de una manera que no sea dañina para los niños.
Ayude a sus hijos a comprender su decisión de separarse
Una vez que esté absolutamente seguro de que quiere terminar su matrimonio, el siguiente paso sería encontrar una manera de comunicar esta decisión a sus hijos. Si bien los niños mayores pueden haberse dado cuenta de lo que ha estado sucediendo, los niños más pequeños pueden tener dificultades para comprender el cambio que se avecina.
Tenga en cuenta la madurez y la edad de su hijo cuando hable sobre el divorcio y, al mismo tiempo, preste atención a su temperamento y su posible reacción. Hable sobre cómo van a cambiar sus vidas y hágalo de una manera tranquila, dejando de lado las emociones negativas. Lo más importante es dejar en claro que no es su culpa y que a veces los adultos simplemente no están de acuerdo y que vivir separados es a veces lo mejor para toda la familia.
Busque ayuda legal para aliviar el proceso emocional del divorcio
Comenzar el proceso de divorcio puede sentirse como si estuviera entrando en un campo de batalla, y toda la situación es increíblemente compleja de manejar, especialmente para los niños. Sin embargo, a veces, el divorcio puede parecer la única solución razonable al problema. Más parejas se están dando cuenta de eso, y países como Australia están viendo un aumento en el número de parejas que buscan asesoramiento o divorcio. Los arreglos de vivienda debido a las restricciones pandémicas de COVID-19 solo han exacerbado el problema, con el 42% de los australianos informando que el bloqueo ha puesto a prueba su relación.
En esos momentos en los que parece que el divorcio es la única opción, el mejor lugar para que los padres comiencen el proceso de divorcio es buscar los servicios de derecho familiar proporcionados por un abogado de familia acreditado en Brisbane y confiar en su experiencia y conocimiento en el campo. Un profesional legal experimentado podrá encargarse de todos los aspectos legales del divorcio y ayudarlo a usted y a su familia a superar este gran cambio de vida más fácilmente.
Proporcione pleno apoyo emocional a sus hijos
Es natural que los niños estén molestos por la decisión de sus padres de separarse, y es durante este período cuando más necesitan la tranquilidad de sus padres. Algunos niños mostrarán sus emociones, otros mantendrán las cosas reprimidas y es posible que no reaccionen a las noticias de inmediato.
Deje en claro que siempre está ahí para ellos y trate de comprender sus emociones, así como sus preocupaciones cuando se abren al respecto, brindándoles apoyo emocional completo en todo momento. Esto permitirá a los padres generar empatía con los niños, pero deben seguir vigilando para poder identificar cualquier signo de problemas potenciales y tratarlos de manera efectiva.
Responda sus preguntas y ayúdelos a adaptarse
Independientemente de la reacción inicial de su hijo a su decisión de divorciarse, desea hacerle saber cómo cambiarán sus vidas y sus rutinas diarias después del divorcio. Sus hijos probablemente tendrán muchas preguntas sobre la escuela, los amigos y sus nuevos arreglos de vivienda.
Su trabajo como padre es planificar con anticipación y prepararse para todas esas preguntas y ser honesto al responderlas. Finalmente, ayúdelos a adaptarse a la nueva situación conservando una sensación de familiaridad. Esto significa mantener sus rutinas diarias, cumplir con los horarios y asegurarse de que pasen suficiente tiempo a solas con ambos padres.
Conclusión
Tan doloroso como puede ser, ir por caminos separados a veces es la única opción. Si bien no existe una manera fácil de hacerlo, los padres deben hacer un esfuerzo para minimizar el dolor inevitable del divorcio y facilitar las cosas para sus hijos, ya que esta es la única forma en que las familias pueden superar este gran cambio y garantizar un futuro mejor.