Si bien nadie es el padre perfecto, existen ciertos comportamientos de crianza que pueden tener efectos negativos graves en los niños. Desde reflejar lo que ven en casa hasta empezar muy por detrás de sus compañeros, estos niños están en desventaja.
Siete maneras en que la mala crianza puede afectar a los niños
Mayor riesgo de trastornos psicológicos
Los niños que se crían en familias que enfrentan abusos tienen muchas más probabilidades de sufrir trastornos psicológicos, según un estudio publicado en la revista Child Development. Aunque ningún trastorno psicológico se destacó como particularmente frecuente, estos niños tenían un mayor riesgo de sufrir trastornos de todo tipo. Además, el estudio encontró que las relaciones familiares, incluidas las relaciones entre hermanos, no eran tan cálidas y amorosas como en otras familias.
Además, los niños que sufrieron abusos directamente tenían muchas más probabilidades que sus compañeros de sufrir un trastorno de estrés postraumático (TEPT), según un estudio publicado en la revista Child Abuse &Neglect. Esto fue particularmente cierto para el abuso sexual, pero también es una preocupación para otras formas de abuso infantil.
Rendimiento deficiente en la escuela
Descuidar a un niño o no satisfacer sus necesidades humanas básicas puede tener un efecto dramático en el rendimiento escolar, según un estudio publicado en la revista Child Abuse &Neglect. El estudio encontró que la negligencia temprana en particular era muy dañina para los niños, impidiéndoles formar relaciones sociales en la escuela y aprender al mismo ritmo que sus compañeros. El estudio encontró que la negligencia era tan dañina en términos de desempeño escolar como el abuso directo.
Además, un estudio publicado en la revista Demography encontró que mover y desarraigar a un niño con frecuencia resultaba en un desempeño deficiente en la escuela. Si bien las mudanzas frecuentes no siempre son un factor que los padres puedan controlar, es importante considerar el efecto en el niño antes de hacer varias mudanzas.
Depresión y Baja Autoestima
Según un estudio publicado en el Journal of Adolescent Research, el estilo de crianza puede tener un efecto directo en la autoestima y la vulnerabilidad de un niño a la depresión. El estudio encontró que si los padres son extremadamente controladores, los niños corren un mayor riesgo de depresión y no se ven a sí mismos de manera positiva.
Otro estudio publicado en el Journal of Child Psychology and Psychiatry encontró que los niños que fueron víctimas de abuso sexual en el hogar tenían una autoestima mucho más baja que sus compañeros. También mostraron más signos de depresión y tenían opiniones negativas sobre sus relaciones familiares.
Violencia y Problemas de Comportamiento
Exponer a los niños a una comunidad donde existe una violencia significativa puede resultar en violencia internalizada y problemas de conducta en los niños, según un estudio publicado en el American Journal of Orthopsychiatry. El estudio también encontró que si los niños eran víctimas de violencia en la comunidad o violencia en el hogar, tenían más probabilidades de exhibir un comportamiento violento en el entorno preescolar.
Un estudio publicado en el Journal of Family Violence encontró que los niños que presenciaron y experimentaron abuso doméstico tenían muchas más probabilidades de sufrir problemas de comportamiento y enojo internalizado que sus compañeros. Esto puede conducir a un "ciclo de abuso", en el que los niños crecen para abusar de otros de la misma manera que ellos fueron abusados.
Fracaso para prosperar
Cuando los niños tienen problemas de crecimiento en la infancia y la primera infancia, por lo general muestran un crecimiento más lento de lo normal, retraso en el desarrollo mental y signos de desnutrición. Un artículo publicado en el American Journal of Orthopsychiatry encontró que el retraso en el crecimiento estaba directamente relacionado con la negligencia de los padres. Los niños no recibían la nutrición adecuada que les permitiera crecer al mismo ritmo que sus compañeros.
Otra causa del retraso en el crecimiento puede ser el abuso médico infantil, según un estudio publicado en la revista Pediatrics. El abuso infantil médico implica que los padres sometan a los niños a procedimientos y tratamientos médicos innecesarios. El estudio encontró que la falta de crecimiento podría ser una señal de que este tipo de abuso está ocurriendo.
Problemas con la Ley
Un estudio publicado en International Journal of Child, Youth, &Family Studies encontró que los niños que fueron abandonados por sus padres tenían más probabilidades de ser procesados por delincuencia juvenil. El estudio propuso investigaciones adicionales sobre la relación exacta entre la negligencia de los padres y la delincuencia juvenil.
Otro estudio publicado en la revista Behavioral Sciences &the Law encontró que si las madres habían sido delincuentes juveniles, era mucho más probable que dieran a luz niños que tenían comportamientos antisociales y una tendencia a tener problemas con la ley. El estudio propuso que esto también podría estar relacionado con el abuso de sustancias por parte de los padres.
Pobre ajuste social
Según un estudio publicado en el American Journal of Orthopsychiatry, es probable que los niños cuyos padres exhibieron un comportamiento violento tengan problemas para adaptarse socialmente en el entorno escolar. Aunque los niños no habían sido abusados directamente, exhibían muchos de los mismos signos de inadaptación social que los niños que son víctimas de abuso.
Otro estudio publicado en Merrill-Palmer Quarterly encontró que los niños que tenían padres hostiles y controladores eran más propensos a estar socialmente angustiados y a ser menospreciados por sus compañeros.
Si sospecha de mala crianza
No se puede negar que las malas prácticas de crianza, como la negligencia, el abuso y la exposición de los niños a la violencia pueden afectar el comportamiento y el desarrollo de un niño. En muchos casos, obtener ayuda puede reducir algunos de estos efectos. Si sospecha que un niño está siendo abusado o descuidado, comuníquese con el departamento de Servicios de Protección Infantil de su estado.