Puede ser realmente frustrante para un padre o padres descubrir las reglas y consecuencias apropiadas para su hijo adolescente. Idealmente, las consecuencias deberían apuntar a enseñarle a su adolescente acerca de la perspicacia, la autorregulación y el autocontrol.
Comience por establecer límites
Es importante pensar en usted mismo como la figura paterna, el que establece las reglas y el que mantiene el equilibrio familiar dentro del hogar. Estos roles no son apropiados para que los cumpla su hijo adolescente, y si terminan haciéndolos, la unidad familiar termina por volverse insalubre. Una vez que haya establecido que está a cargo, continúe manteniendo esta posición siendo constante. Si está criando a su hijo adolescente con otra figura paterna, ambos deberán estar alineados en cuanto a las reglas y regulaciones de su hogar.
Predicar con el ejemplo
Después de establecer límites y mantener la mentalidad de que usted es el cabeza de familia, en lugar de un amigo, es mejor mostrarle a su hijo adolescente cómo es el comportamiento apropiado. Si comete un error, utilícelo como un ejemplo de enseñanza para su adolescente. Explique su proceso de pensamiento, su experiencia emocional y cómo ha reconciliado la situación. Asegúrese de elegir ejemplos apropiados para compartir con su adolescente y nada demasiado pesado o serio.
Elija las consecuencias apropiadas
Al pensar en las consecuencias, asegúrese de que sean apropiadas para la edad y no demasiado extremas. Trate de ponerse en el lugar de su adolescente y piense cómo reaccionaría ante los castigos que está imponiendo antes de hacerlo oficialmente.
Ser irrespetuoso
Es típico que un adolescente sea irrespetuoso al menos de vez en cuando. Al hacerlo, están experimentando con su independencia y empujando los límites. Esta es una parte normal de ellos que se separan de sus unidades parentales y se establecen como adultos. Hable con ellos de una manera tranquila y racional sobre por qué es importante ser respetuoso y pregúnteles si alguna vez han experimentado un momento en el que se sintieron irrespetados. Si una conversación no es suficiente, puede considerar quitarle un pequeño privilegio, como el uso del teléfono o la televisión, por un bloque de tiempo. Si eso no funciona, aumente la cantidad de tiempo sin el privilegio.
Romper el toque de queda
Si su adolescente rompe el toque de queda, primero averigüe por qué. Es importante ayudar a su hijo adolescente a aprender cómo desacelerar sus procesos de pensamiento y notar qué lo llevó a tomar esa decisión. Realmente profundice en esto hasta que quede claro que entienden por qué tomaron esta decisión. Los adolescentes tienden a ser impulsivos y tienen dificultad para pensar en sus opciones, por lo que puede esperar que tomen varias de estas decisiones de acción rápida. Debido a que romper el toque de queda tiende a afectar la confianza entre un padre y su hijo, piense en algunas formas en que pueden recuperarla. Esto puede incluir:
- Hacer mandados para usted que deben hacerse
- Ayudar a una mascota o a un hermano
- Haciendo algunas tareas
La próxima vez que su hijo adolescente salga, pídale que le envíe un mensaje de texto varias veces para que pueda comenzar a reconstruir la confianza entre ustedes. Sea muy claro acerca de las horas en las que necesitará saber de ellos.
Altercado físico o intimidación
Si su hijo adolescente se involucra en altercados físicos o lo atrapan acosando a otro niño, es muy importante que observe primero su propio comportamiento. Piense si les ha enviado algún tipo de mensaje que podría haber promovido este tipo de comportamiento. Si es así, es fundamental que reconozca su propio comportamiento y sepa que hay tiempo para ayudar a su adolescente a cambiar su mentalidad hacia la violencia y la intimidación también.
- Hable con su adolescente sobre la importancia de tratar a sus compañeros con amabilidad y trate de ayudarlo a comprender por qué se comporta de esta manera.
- Muéstreles que la intimidación nunca está bien y que hay otras formas de comunicar sus sentimientos.
- Utilice diarios o controles emocionales como consecuencia de su comportamiento.
Todos los días pídales que escriban en un diario o que hagan una verificación verbal con usted sobre sus sentimientos y cómo sus sentimientos afectaron algunas decisiones que tomaron ese día antes de que puedan acceder a algo que les gusta, como su teléfono, automóvil, computadora o televisión.
Malas calificaciones
Si su adolescente está obteniendo malas calificaciones, hable con él acerca de por qué cree que está sucediendo esto. Es posible que necesiten un tutor o alguna ayuda adicional con un tema determinado. Si no necesitan ayuda, pero eligen holgazanear, puedes monitorear sus tareas y estudios en casa. Reserve una cierta cantidad de tiempo como una o dos horas en las que deben estar estudiando antes de que puedan hacer o tener algo que les guste. Esto también les ayudará a establecer una buena rutina y hábitos de estudio que pueden beneficiarlos como adultos.
Haga coincidir el castigo con la mala conducta
Criar a un adolescente es realmente desafiante y, a veces, puede poner a prueba tu paciencia. Recuerde abordar las reglas y las consecuencias con empatía y coherencia, y no tenga miedo de comunicarse con amigos, familiares o consejeros para obtener apoyo adicional.