El duelo es una emoción difícil y dolorosa que es una parte natural de la vida. Y si bien es importante que te permitas vivir la experiencia completa del duelo, usar la meditación guiada puede ayudarte a superar un momento difícil. La meditación es una herramienta que puede ayudarlo a experimentar y procesar de manera segura los sentimientos asociados con el duelo y la pérdida.
Meditación guiada para el duelo
La siguiente meditación guiada puede ayudarte a permitir la sensación de duelo. La meditación no busca aliviar el duelo, ya que la única manera de superar el duelo es atravesándolo. Sin embargo, trabajar con esta meditación guiada por el duelo le permite procesar sus emociones en un entorno seguro para que pueda experimentar la sensación completa del duelo, ya que solo cuando permite el duelo puede procesarlo por completo y comenzar a superarlo.
Para hacer esta meditación, siéntate o acuéstate cómodamente en algún lugar donde no te molesten. Cierra los ojos, respira cómodamente y permite cada sensación a medida que surja, acercándote a ella con la intención de experimentar plenamente tus emociones y sensaciones en lugar de bloquearlas.
Guión de meditación guiada por el duelo
Este guión es para la meditación anterior si desea hacer su propia meditación autoguiada.
Siéntese o acuéstese cómodamente. Cierra los ojos, coloca las manos sobre el corazón y comienza a respirar profundamente desde el estómago. Con cada respiración, inhale por la nariz y exhale por la boca. Siente tu pecho subir y bajar debajo de tus manos con tu respiración. Si tu atención se desvía, llévala suavemente de vuelta a tu respiración.
Ahora, respire profundamente por la nariz mientras cuenta hasta cuatro, permitiendo que la respiración fluya a través de sus pulmones hacia su estómago. Aguanta la respiración mientras cuentas hasta cuatro y luego exhala lentamente por la boca mientras cuentas hasta ocho.
Continúe respirando de esta manera. Con cada exhalación, siente cómo tu cuerpo se relaja más profundamente.
Ahora, permítete sentir tu dolor o cualquier otra emoción que pueda surgir. Note en qué parte de su cuerpo surge esta sensación. Da la bienvenida a la sensación con un sentido de curiosidad y compasión por ti mismo. Si sientes juicios sobre tus emociones, déjalos ir suavemente con la conciencia de que cualquier cosa que sientas en este momento es completamente natural. Permita todas y cada una de las emociones que surjan con amor y autocompasión.
Sepa que no importa cómo se sienta, está seguro, apoyado y profundamente amado.
Ahora, visualiza a la persona por la que estás afligido. Imagina que esa persona está parada frente a ti, lista para tener una conversación. ¿Qué te gustaría decirles? ¿Qué te gustaría que te dijeran? En el ojo de tu mente, ten la conversación que necesitas tener sin juzgar. Di lo que necesites decir y escucha lo que necesites escuchar.
Cuando termine su conversación, sepa que si necesita volver a ver a su ser querido, puede regresar a este espacio de comunicación seguro y sin prejuicios. Despídase de su ser querido por ahora y permítale desaparecer o desaparecer de su vista.
A medida que su ser querido se desvanece de la vista, una vez más permítase experimentar cualquier emoción que surja sin juzgar ni temer. Visualiza atraer esa emoción a tu corazón donde se inunda con la energía del amor y la compasión.
Regrese su atención a su respiración una vez más. Inhala profundamente por la nariz y exhala por la boca. Mientras inhala, visualice una luz blanca y amorosa entrando en su respiración, moviéndose hacia su corazón y pulmones, y bombeando por todo su cuerpo con cada latido de su corazón. Mientras exhala por la boca, visualice su dolor, tristeza y emociones negativas fluyendo con su respiración, donde están rodeadas por la amorosa luz del universo.
Continúe inhalando por la nariz y exhalando por la boca, notando cualquier emoción que surja sin juzgarla y liberándola tan pronto como pueda.
Regrese su atención a su cuerpo ahora. Observe dónde se conecta su cuerpo con lo que sea que esté sentado o acostado. Haga pequeños movimientos, moviendo los dedos de las manos y los pies, seguidos de movimientos y estiramientos más grandes. Cuando estés listo, abre los ojos.
Cómo usar una meditación de duelo
Puede cerrar los ojos, recostarse y reproducir el video cada vez que sienta la necesidad de procesar el duelo, o puede usar una aproximación del guión para guiar su propia meditación. Si estás guiando tu propia meditación, considera los siguientes consejos:
- Comience concentrándose en su respiración hasta que esté en un estado relajado.
- Permita que cualquier sentimiento de dolor que tenga aflore sin juzgarlo. No intente evitarlos o suprimirlos.
- Observe dónde siente sus emociones en su cuerpo y visualice enviar una luz blanca y amorosa a esos sentimientos.
- Si siente que hay cosas sin decir con su ser querido, imagínelo en su espacio y converse con él, diciéndole todo lo que necesita decir y permitiéndole decir todo lo que siente que necesita escuchar de él.
- Termine respirando una amorosa luz blanca con su aliento y permitiendo que inunde su cuerpo.
El duelo es un proceso
El duelo es un proceso emocional natural que todos experimentamos en algún momento de nuestra vida. Si bien muchas personas intentan reprimir el dolor, hacerlo puede hacer que el dolor se prolongue y quede sin resolver. El uso de una meditación guiada para llevarlo de manera segura a su duelo puede ayudarlo a experimentar la emoción por completo para que se mueva a través de usted sin atascarse en usted. Puedes usar esta meditación cada vez que sientas una profunda sensación de dolor.