A pesar de sus largos y oscuros inviernos, los daneses se encuentran entre los más felices de la Tierra. ¿Su secreto? ¡Hogares libres de desorden que son acogedores, cálidos y acogedores! Hemos reunido una serie de consejos directos de Escandinavia que te ayudarán a que tu nido sea igual de sencillo. ¡Sigue leyendo para empezar!
Facilite las despedidas con un motivo para sentirse bien
"Dejar ir nuestras cosas puede evocar sentimientos fuertes", dice la diseñadora de vida danesa Lena Bentsen, autora de Goodbye Clutter, Hello Freedom ($12.99, Amazon). "Los clientes a menudo se resisten a donar artículos no deseados a lugares genéricos".
Encontrar una organización a la que le entusiasme retribuir puede marcar la diferencia al motivarlo a pasar cosas que ya no necesita. Tus guarderías, por ejemplo, pueden estar encantadas de recibir juguetes y materiales de arte queridos, mientras que el refugio de animales donde adoptaste a tu cachorro seguramente recibirá mantas y almohadas viejas.
Limpieza rápida con una instantánea
El realismo es un sello distintivo del enfoque danés del desorden, señala Bentsen. "Sabemos que para lograr nuestros objetivos, debemos reducirlos en pedazos del tamaño de un bocado".
En lugar de abordar una habitación completa, comience con, digamos, un gabinete desordenado. ¿No estás seguro de por dónde empezar? “Toma fotos de tu casa desde diferentes ángulos”, aconseja. “Cuando miramos una foto, nuestros ojos se enfocan en lo que rompe el flujo de la imagen, lo que nos ayuda a detectar áreas clave que debemos abordar primero”.
Cuenta una historia con tus recuerdos
“Aunque la mayoría de nosotros tenemos demasiados recuerdos, definitivamente deberíamos guardar cosas que cuenten nuestra historia”, dice Bentsen. Imagina que estás organizando una exposición de museo sobre tu vida. "Verás que guardar un disco de vinilo especial es suficiente para retroceder en el tiempo y no necesitas toda la colección".
Cerrar cualquier círculo abierto
Imagina que cada tarea se ejecuta en un círculo que comienza y termina en el mismo lugar. “Los daneses creen en cerrar estos círculos en lugar de dejarlos incompletos”, dice Bentsen. “Cuando preparamos una taza de té, la tetera se enjuaga y se devuelve a su lugar antes de disfrutar nuestro primer sorbo”. El resultado es más comodidad y menos tiempo de limpieza en general.
¿Suena agotador? “¡Todo lo contrario!” ella promete “Cada círculo cerrado te da una explosión de energía. Luego disfrutas regresar a ese espacio ordenado más tarde”.
Prepara el escenario para la alegría y la serenidad
Puede usar señales visuales para crear un ambiente acogedor y tranquilo, señala Bentsen. Comience por asegurarse de que al menos una superficie en cada habitación esté ordenada. “El simple hecho de ver que un solo tramo de espacio en el mostrador está despejado hace que sea menos probable que las personas dejen migajas”, explica. "Del mismo modo, ver cubículos de zapatos vacíos en la entrada indica a la familia y a los invitados que coloquen sus zapatillas en el lugar correcto".
Esta historia apareció originalmente en nuestro sitio hermano, Woman's World.