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Causas y tratamiento de hemorragias nasales frecuentes en niños

Causas y tratamiento de hemorragias nasales frecuentes en niños

Una hemorragia nasal ocasional es casi un rito de iniciación infantil, pero las hemorragias nasales frecuentes pueden ser más incómodas y preocupantes. Si su hijo sufre hemorragias nasales regulares, averigüe qué podría estar causando el problema y cómo puede abordarlo.

Causas de hemorragias nasales frecuentes

A todo el mundo le sangra la nariz, dice la Dra. Dorota Szczepaniak, pediatra de Riley Children's Health en Indiana. Sin embargo, si su hijo los tiene con frecuencia, debe consultar a su médico para averiguar qué está causando el problema y cómo puede ayudar a tratarlo.

¿Qué constituye frecuente?

"Más de una vez a la semana significa que algo puede estar mal", comparte el Dr. Szczepaniak. Dado que los niños en edad preescolar tienden a tener más hemorragias nasales que los niños mayores o los adultos, las hemorragias nasales que ocurren dos o tres veces por semana serían motivo de preocupación para este grupo de edad.

Causas comunes

Las hemorragias nasales comúnmente son causadas por algún tipo de trauma, pero existen otras razones por las que ocurren. Todas las razones más frecuentes se deben a traumatismos en los pequeños vasos sanguíneos de la nariz, lo que los hace gotear y sangrar.

  • hurgarse la nariz
  • Sonarse la nariz con demasiada fuerza
  • Resfriados y alergias estacionales que causan aumentos en la mucosidad ("mocos") e hinchazón
  • Aire seco que causa sequedad en la nariz
  • Objetos extraños en la nariz

Causas raras

Las causas raras de hemorragias nasales tienden a ser las que más preocupan a los padres. Estas causas no son probables y generalmente resultan de una coagulación anormal, lo que facilita el sangrado.

  • Hemofilia
  • Aspirina u otros medicamentos
  • Leucemia
  • Enfermedad crónica
  • Problemas anatómicos

Efectos secundarios de las hemorragias nasales periódicas

Las hemorragias nasales frecuentes pueden interrumpir las actividades del niño y de los padres mientras tratan la hemorragia, la limpian y se preocupan. Aparte de contener y limpiar la sangre, el efecto secundario más preocupante es la rara ocasión en que un niño se vuelve anémico.

Qué pueden hacer los padres para ayudar

Como padre, su trabajo principal es mantener la calma cuando su hijo está lidiando con un problema de salud. Si su hijo tiene la edad suficiente para hacerlo solo, puede guiarlo a través de los procedimientos adecuados y brindarle apoyo.

Contener y detener el sangrado

La mayoría de las hemorragias nasales se detienen por sí solas en tres a cinco minutos, pero querrá evitar que la sangre gotee por todas partes. Siente a su hijo con la cabeza ligeramente inclinada hacia adelante. Usando pañuelos o un paño limpio, pídales que se suenen la nariz suavemente. Luego, debes pellizcar firmemente la parte inferior suave de su nariz entre el pulgar y el dedo durante 10 minutos. No metas nada dentro de la nariz del niño y no sueltes tu agarre durante este tiempo.

Desaliente los comportamientos que irritan la nariz

Si los culpables son comportamientos como hurgarse la nariz, puedes decir regularmente algo como "Nos hurgamos la nariz en privado".

Mantenga su nariz hidratada

La autoproclamada "regla de crianza número tres" del Dr. Szczepaniak es que los padres deben usar regularmente una niebla salina para humectar la nariz del niño. La piel irritada podría causar más dolor e incomodidad además de las hemorragias nasales reales.

Cuándo ver a un médico

Los niños en edad preescolar con hemorragias nasales que duran entre tres y cinco minutos o los niños mayores con hemorragias nasales que duran más de 10 minutos deben consultar a un médico. También debe "confiar en su instinto paterno", dice el Dr. Szczepaniak, "si está preocupado, haga que el pediatra vea al niño". Los niños con otros problemas de sangrado, que vomitan sangre, se ven pálidos o tienen fiebre o sarpullido también deben buscar atención médica.

Qué puede hacer el médico

Las condiciones de salud que pueden aumentar la posibilidad de hemorragias nasales siempre deben determinarse en una conversación con el pediatra del niño.

Comprobar si hay condiciones médicas graves

El médico de su hijo se asegurará de que las hemorragias nasales no sean el resultado de una afección grave. A menudo, esto requerirá un análisis de sangre para descartar problemas de coagulación de la sangre. A continuación, se realizará un examen físico completo del historial médico del niño para ayudar a determinar qué está pasando.

Ofrecer opciones de tratamiento

Si las hemorragias nasales no se deben a una afección más grave, su médico podría recomendar algunas cosas para ayudar a prevenir y tratar las hemorragias nasales.

  • Use aerosol, gotas o gel de solución salina (agua salada) todos los días en la nariz para humectarla.
  • Ponga una pequeña cantidad de vaselina o un ungüento similar justo dentro de la nariz cerca de la parte interna del hueso (tabique) para evitar la sequedad por la noche.
  • Use un humidificador en una configuración baja para ayudar a combatir el aire seco.
  • Como último recurso, el médico de su hijo puede usar nitrato de plata o calor para cauterizar el vaso sanguíneo para que deje cicatrices y deje de sangrar.

Controle las hemorragias nasales

Si bien las hemorragias nasales frecuentes en los niños pueden ser molestas y parecer dramáticas, a menudo son causadas por circunstancias comunes y pueden tratarse. Lleve un registro de la frecuencia con la que ocurren, luego consulte al médico de su hijo para obtener consejos sobre cómo tratar el problema.