El abuso de ancianos consiste en cualquier tipo de abuso infligido a una persona de 60 años o más. Los tipos de abuso de ancianos incluyen físico, sexual, emocional, financiero, negligencia y abandono; las investigaciones señalan que aproximadamente una de cada seis personas mayores son abusadas cada año.
Abuso físico
El abuso físico incluye infligir cualquier daño corporal intencional utilizando objetos o partes del cuerpo. Ejemplos de esto incluyen:
- Morder, pellizcar, abofetear
- Golpes, patadas, bofetadas
- Tirar objetos a la persona
- Bloquearlos físicamente para que no escapen
- Restringir inapropiadamente
- Intento de ahogamiento
- Puñaladas
Abuso sexual
El abuso sexual de los ancianos puede ocurrir en hogares de ancianos, en sus propios hogares, en centros de atención superior y en cualquier otro lugar donde puedan encontrarse en situaciones vulnerables. Se ha observado que la mayor incidencia informada de abuso sexual de ancianos ocurrió en hogares de ancianos y fue cometida por empleados y otros residentes. Los tipos de abuso sexual incluyen:
- Agresión sexual
- Violación
- Cópula oral forzada
- Penetración anal forzada
- Penetración con un objeto extraño
- Penetración digital
Abuso Emocional
El abuso emocional puede causar ansiedad intensa, depresión y trastorno de estrés postraumático (TEPT). En un estudio de alrededor de 10,000 personas mayores, aquellos con la mayor cantidad de síntomas depresivos tenían el doble de probabilidades de haber experimentado abusos previos. Ejemplos de abuso emocional incluyen:
- Gaslighting, también conocido como locura
- Gritar y humillar a la víctima
- Amenazar e ignorar
Abuso Financiero
El abuso financiero está muy poco denunciado, con solo uno de cada 44 casos denunciados y el 90 por ciento de los perpetradores son miembros de la familia. Aproximadamente uno de cada nueve adultos mayores informa haber sufrido abusos financieros durante el último año. El abuso financiero incluye:
- Estafas relacionadas con el dinero y robo de identidad
- Acceder a la cuenta bancaria de la víctima sin consentimiento
- Negarse a brindar a la víctima la atención adecuada como una forma de quedarse con una mayor parte de su dinero
- Robar tarjetas de crédito, efectivo y cheques de la víctima
- Amenazar la seguridad de la víctima a menos que se dé dinero
Negligencia y Abandono
El descuido de los ancianos ocurre cuando un cuidador designado no brinda la atención adecuada, lo que incluye alimentación, vivienda, ropa y atención médica adecuados. El autodescuido ocurre cuando una persona mayor deja de cuidarse a sí misma. Esto también se puede denunciar como abuso. El abandono ocurre cuando una persona mayor se ve obligada a valerse por sí misma a pesar de no poder hacerlo física o mentalmente. Los signos de negligencia incluyen higiene deficiente, deshidratación, desnutrición, ropa sucia y condiciones de vivienda inseguras.
Prevalencia del abuso de ancianos
En un estudio de alrededor de 4100 personas de 60 años o más, la incidencia de abuso fue de alrededor del 4,6 por ciento. El desglose fue el siguiente:
- 1.8 por ciento experimentó abuso físico.
- 1.9 por ciento experimentó abuso emocional.
- 1.8 por ciento experimentó negligencia.
- El abuso sexual ocurre entre el 0,3 % y hasta el 2,2 % de los adultos mayores de 65 años.
Otros estudios han citado que el abuso de ancianos afecta aproximadamente al 10 por ciento de la población en los Estados Unidos, y los investigadores señalan que es muy probable que este número esté muy subestimado. Los principales factores de riesgo incluyen vivir con una gran cantidad de miembros de la familia, excluyendo al cónyuge, lo que aumenta las posibilidades de abuso financiero y físico. El aislamiento también es un factor de riesgo cuando se trata de todo tipo de maltrato a personas mayores.
Comprender el abuso de ancianos
El abuso de ancianos es un hecho muy común que puede ser perpetrado por miembros de la familia, miembros del equipo de atención médica, miembros del personal del centro, compañeros y cualquier otra persona en una posición de poder. Si sospecha que se está abusando de una persona mayor, notifique de inmediato a la policía, al defensor del pueblo o a los Servicios de Protección para Adultos.