Si has visto la película de Disney Encanto, lo más probable es que recuerdes lo importante que fue la casa familiar, la Casita, para la historia. Los cimientos de la Casita se estaban agrietando y cada miembro de la familia sintió el impacto de diferentes maneras. Sin una base sólida, las relaciones se estaban quebrando y cada individuo dentro del hogar sentía que faltaba algo muy importante en sus vidas. Cuanto más se ignoraban estas grietas, más prominentes y disruptivas se volvían las cosas.
Tal como sugiere la película, piensa en los cimientos de una casa como el lugar de dónde vienes. Tu base incluye tu infancia, los valores e ideales de tu familia, y cómo fuiste tratado y te enseñaron a operar en el mundo.
A continuación se presentan algunos ejemplos de personas que tienen grietas en sus cimientos:
- Laura y Raquel son buenas amigas y se conocen desde hace años. Laura siente que puede acudir a su amiga en busca de consejos y, a menudo, comenta cómo Raquel es buena escuchando. Pero recientemente, Laura ha notado que comparte bastante más que Raquel y en realidad no sabe mucho sobre la vida personal de Raquel. Ella comienza a cuestionar su amistad.
- Miguel es un gerente de proyectos competente que se lleva bien con los empleados que trabajan debajo de él. Es respetado por su ética de trabajo y dedicación a sus proyectos. Recientemente, su supervisor ha notado que Miguel tiene dificultades cuando surgen conflictos entre su equipo. Miguel se siente extremadamente incómodo cuando le señalan los problemas. Como resultado, hay múltiples conflictos sin resolver que interfieren con el entorno laboral.
- Antonio está cada vez más frustrado con su novia a la hora de tomar decisiones. Claudia a menudo se desvía cuando él le pregunta qué quiere y Antonio tiene que elegir las comidas, planificar salidas o incluso elegir qué programas ven juntos. Se encuentra tratando de leer atentamente, ya que Claudia rara vez comparte cómo se siente.
¿Qué tienen en común Raquel, Miguel y Claudia? En el exterior, parecen tenerlo todo bajo control, pero las personas que los rodean descubren lentamente áreas en las que luchan. Estas grietas en sus cimientos provienen del abandono emocional infantil.
Cuando las necesidades emocionales no se satisfacen en la crianza de un niño, a ese niño se le niegan los ingredientes vitales para vivir una vida adulta vibrante, sincera y conectada. Tal vez sin siquiera saberlo, construyeron su vida sobre una base agrietada, torcida o inestable.
Equiparse con conocimientos sobre el abandono emocional infantil puede cambiar tu vida y la de tu ser querido. Si alguien que conoces tiene grietas en sus cimientos por negligencia emocional, es posible comprenderlo mejor, aprender a comunicarte de manera efectiva o incluso compartir información que conoces sobre la negligencia emocional infantil y la marca que deja.
6 Rasgos a tener en cuenta en adultos con negligencia emocional infantil
- El tema de conversación rara vez es sobre ellos. Tal vez le hagas preguntas a tu amigo o familiar sobre sí mismos y ellos respondan con respuestas breves o cambien de tema. Es posible que notes que tú eres quien habla la mayor parte del tiempo.
- Minimizan sus propias necesidades. Están atentos a las necesidades de los demás, pero parecen descuidarse a sí mismos. El cuidado personal puede ser una lucha.
- Tienen problemas para mostrar y comunicar cómo se sienten. A menudo te preguntas qué piensan o sienten y te encuentras intentando adivinar. A veces puede parecer imposible saber si están enojados o heridos.
- No comparten sus preferencias, gustos o disgustos. Es posible que sientas que no conoces esta información básica sobre tu ser querido.
- Evitan los conflictos. Rara vez revelan los problemas que tienen. O, si surge un problema en su relación con ellos, tienen dificultades para hablar de ello, por lo que los problemas no se abordan.
- Cuando las personas que los rodean expresan abiertamente sus sentimientos, se sienten incómodos. Pueden congelarse, disculparse innecesariamente o irse por completo.
Cuando los padres ignoran o rechazan las emociones, el niño aprende que sus sentimientos no importan. Por lo tanto, hacen lo que necesitan hacer para sobrevivir: tapar sus emociones para que no sean una carga para ellos mismos ni para los demás.
Si bien esto puede haber sido útil en la infancia y el entorno en el que vivían, ahora viven una vida fuera de contacto con el mundo emocional. Tienen dificultades para identificar y comprender sus sentimientos, sus preferencias y lo que necesitan. En el fondo, sienten que no importan y son menos válidos que los de todos los demás.
Cuando las personas con negligencia emocional amurallan sus emociones, involuntariamente amurallan aspectos esenciales de quiénes son. Luego se separan de su emoción, la expresión más profunda y personal de quiénes son. Pueden parecer bien para todos los demás. Pero es solo cuestión de tiempo antes de que alguien entre en su casa y note las grietas.
Qué hacer si crees que alguien tiene negligencia emocional de la infancia
- Interesarte en quiénes son y validar lo que tienen que decir. Hazles preguntas y dales la oportunidad de pensar en sí mismos para variar. Esto puede guiarlos a reflexionar sobre sus propios sentimientos, deseos y necesidades.
- Ofrece apoyo y compasión cuando haya conflicto. Recuerda que el conflicto es especialmente difícil para alguien con negligencia emocional. Usa tus mejores habilidades de comunicación y reconoce su incomodidad.
- Si crees que está bien, habla con tu ser querido sobre la negligencia emocional. Puedes compartir amablemente la información que has aprendido o guiarlos a recursos útiles.
- Ten cuidado. Tu trabajo es ser un amigo o familiar que lo apoye, no asumir el trabajo de reparar las grietas en sus cimientos usted mismo. Necesitan hacer este trabajo en su propio tiempo y cuando estén listos.
Child Development Lecturas esenciales
Tu amigo o familiar con negligencia emocional en la infancia no recibió educación emocional ni validación emocional, ni sintió que era seguro estar en contacto con sus emociones mientras crecía. Puedes darles algo que nunca antes habían tenido: aceptación emocional y seguridad.
Al igual que en Encanto, lo que ayudó a la Casita a formar una base nueva, sólida y estructuralmente sólida fue el amor y la conexión entre los miembros de la familia dentro del hogar. Con un poco de atención y compasión, se puede construir una nueva base.
© Jonice Webb, Ph. D.